Cada cierto tiempo en el marketing y de acuerdo a su evolución, aparecen nuevas especies de consumidores. Una de las más peligrosas del último tiempo es el Prosumidor, acrónimo de la unión de Productor y Consumidor, acuñado por Alvin Toffler, en su libro La Tercera Ola.
El Prosumidor es un nuevo consumidor, que se le reconoce por ser inconformista y crítico de lo que el mercado le ofrece. Consumidor y Productor de contenidos a la vez. Va en sus genes ser exigente y evita seguir la moda, su instinto lo lleva a romper los moldes que le impone la sociedad.
Una forma simple de conocer su hábitat, es introducirse en las redes sociales, lugar que las marcas han usado para difundir sus productos y servicios. Las empresas han tenido que trabajar este aspecto, dándole espacio al cliente a que se manifieste para ser escuchado, creando una comunicación que va y viene.
Este animal consumidor ¡es impredecible!, tiene la capacidad de generar contenidos y crear ideas que pueden tener alto impacto en las comunidades (junten miedo!). Es una especie tan dominante, que el origen de las “tendencias” y “hashtag de moda” provienen de su manera de marcar territorio, creando audiencias que siguen instintivamente un mensaje determinado. Que para el bien de las marcas, ¡ojalá que sea positivo!.. o si no?
Que las plataformas digitales sean públicas, es lo que ha incrementado los dominios de los Prosumidores. Si promocionan un producto o servicio en redes sociales, el post puede tener múltiples interacciones y la jauría de seguidores esperará hambrienta lo que se comente, advierta o recomiende de una “presa”.
Los Prosumidores son solitarios, pero hacen manada en un instante. Ellos marcaron una tendencia donde la opinión si es creíble y aunque los demás miembros de la manada no conozcan personalmente al emisor, es fundamental en la decisión para seguir o desprestigiar una marca, adquirir o rechazar un producto o servicio.
El Prosumidor es una especie desconfiada, prefiere hacer su propia opinión porque no cree en lo que le dicen los medios. Lo que percibe presencialmente con sus todos sus sentidos, lo comparte de manera inmediata, formando nuevas y leales comunidades
Conocer esta nueva especie, que no es tan nueva por lo demás, porque ya tiene amplios dominios en nuestra jungla, es importante para las marcas y la configuración de sus estrategias de marketing, y no solo digital, ya que lo óptimo es logar una sinergia con nuestro marketing tradicional y así llegar a los Prosumidores a través un marketing multimedial u omnicanal… (Gran tema para desarrollar en otra oportunidad).
En resumen, los Prosumidores son una especie más informada, ya que disponen de variadas fuentes de información, producen contenido y lo publican en sus redes sociales, dan opiniones y comparten experiencias sobre algún producto o servicio, tienen el poder de aumentar o disminuir la reputación de una empresa, tienen a su disponibilidad la tecnología que usa para tomar decisiones de compra, es más investigador ya que no se conforma con la mera información y son incrédulos de lo que dicen los medios de comunicación. Sin duda el Prosumidor, es una especie dominante que llegó para quedarse.